viernes, 31 de mayo de 2019

JOAN BROSSA poesía visual

Fotoperiodismo

Portugal premia el trabajo del fotoperiodista gallego Óscar Corral a bordo del ‘Aquarius’

La convocatoria internacional Estação Imagen distingue con una mención de honor la fotografía Transfer, que describe el traspaso de migrantes de un barco a otro en alta mar

'Transfer'.
'Transfer'. ÓSCAR CORRAL
Santiago de Compostela 
"Transfer" es el nombre con el que se conoce la operación de traspaso de migrantes entre barcos en alta mar. Y Transfer es también el título de la fotografía del fotoperiodista de EL PAÍS en Galicia, Óscar Corral, que ha conmovido al jurado del certamen internacional de Estação Imagen, en Coímbra, el único premio de fotoperiodismo que organiza anualmente una entidad en Portugal. Cuatro hombres con mascarilla, enfundados en higiénicos monos blancos, flanquean una embarcación llena de seres humanos con salvavidas naranja. De lejos, desde el objetivo de la cámara, podría parecer que se trata de una gaveta cargada de fruta meticulosamente alineada para su venta.
No todos los migrantes son acogidos por barcos de rescate, sino que "son rescatados por buques mercantes" que los traspasan a navíos militares, "que a su vez los transfieren a los barcos de las ONG". En alta mar "los migrantes son tratados como mercancía", concluye la presentación que acompaña la fotografía en el catálogo de premiados de la asociación cultural Estação Imagen. La redactora Naiara Galarraga Gortázar y Óscar Corral fueron los enviados de EL PAÍS a bordo del barco humanitario Aquarius durante la crisis del pasado mes de junio en el Mediterráneo.
Estação Imagen ha distinguido con menciones de honor tanto esta foto de Corral como la serie Encarnados, del autor ourensano Tono Arias. A través de retratos de las máscaras tradicionales del Entroido gallego ubicadas en entornos cotidianos, el artista juega con la ambigüedad entre la ficción y esa realidad menos vibrante y colorida que acompaña al hombre cada día. Entre los premiados de este año están, entre otros, Leonel de Castro, Octávio Passos, Mário Cruz o João Porfírio, con una serie sobre los últimos devastadores incendios en el Algarve.

Bienvenido al 'Aquarius'

"Aunque ninguno de los dos olvidaremos nunca aquella noche, cada uno se quedó con un instante. Un instante que volvía en nuestras conversaciones durante a odisea que vino después. A Óscar le impresionó aquel chaval que subió a bordo casi desnudo. Muy delgado, fibroso. Solo llevaba calzoncillo. Un calzoncillo verde. Tiritaba. 'Bienvenido al Aquarius', le dijo al llegar uno de los humanitarios, como cada uno de los otros 629 rescatados de aquella noche", describe Galarraga en un texto escrito para contextualizar la imagen en el concurso. "Nosotros intentábamos no perder detalle mientras a mí me borboteaban las preguntas… ¿Cómo se sentirán ahora mismo? ¿Qué les habrá pasado por la cabeza durante las últimas horas, o días, mientras esperaban a que alguien apareciera en el horizonte?", continua la redactora de EL PAÍS.
Un rescate en el Aquarius es una "especie de gran coreografía mil veces ensayada en la que cada uno tiene un papel perfectamente medido". El "instante crítico" es en el que la lancha de rescate se aproxima a la patera. Los migrantes deben conservar la calma. Y en el primer rescate de aquella noche lo hicieron. Reinaba el silencio. Hombres y mujeres a punto de ser salvados "callaban". "Esa misma noche decenas de personas de una segunda patera cayeron al mar y tuvieron que ser sacadas una por una del agua". Todos creían que "en unas horas o días estarían en Italia. En la soñada Europa".
Pero poco después "llegó el tuit que lo cambió todo", sigue relatando la periodista. "El nuevo ministro del Interior de Italia, Matteo Salvini, líder de la xenófoba Liga Norte, discípulo tuitero de Trump, anunció que cerraba los puertos". Y de esta manera "lo que iba a ser un reposado reportaje sobre el creciente pulso entre las ONG y los Gobiernos europeos en el Mediterráneo central a cuenta de los rescates se convirtió en una amplia cobertura multimedia sobre una crisis política que acaparó la atención de millones de europeos".
"Todo lo que hicimos a partir de ese momento tenía un solo propósito: que los lectores conocieran a aquellas 630 personas", prosigue la enviada especial. "A Progress, a sus padres, a su hermano Donald, a Jessica, a Jack Freeman, a Moses, a Ibrahim, a Ali". Para explicar a través de sus vivencias "por qué alguien se mete en una patera", qué es lo que "pretende dejar atrás" y "a qué aspira" en Europa. "La inmigración modela el mundo", defiende Naiara Galarraga Gortázar. "Emigrar, desplazarse para prosperar o para huir del peligro, es tan viejo como la historia", pero ahora mismo es "central en la política europea".

El buen trato, un libro de Fina Sanz

El buentrato

Como proyecto de vida

Fina Sanz

Todo el mundo conoce el problema del maltrato. Fina Sanz nos propone en este libro un cambio de perspectiva sumamente original: un modelo de convivencia desde y para el «buentrato».
El buentrato ha de crearse en un espacio personal, relacional y colectivo. Para ello, debemos abandonar creencias antiguas, valores y comportamientos que reproducen –de forma consciente o inconsciente– el maltrato. Por contra, hemos de crear nuevos valores, otras formas de percibirnos y de relacionarnos que favorezcan el desarrollo personal y unas relaciones humanas, sociales y con la Naturaleza desde el respeto a la diferencia, la cooperación y la solidaridad, la armonía y la paz.
El buentrato aporta, así, las claves para la reflexión, la discusión y la concreción posterior de un modelo más saludable de convivencia en diferentes áreas laborales y de la vida cotidiana.
En este libro revolucionario, la autora sintetiza la esencia de muchos de los trabajos y metodologías que lleva realizando desde hace décadas, y que se han plasmado en sus libros y formaciones.

Laberintos en la vida cotidiana de Fina Sanz

imagen laberinto
“Determinadas situaciones conflictivas en nuestra vida se viven como laberínticas, sin saber por dónde ir, qué camino tomar y cuál es el centro, el sentido para nuestra comprensión y evolución. Son periodos y procesos donde las personas podemos sentirnos aterrorizadas, desorientadas, perdidas, viviendo el miedo a la locura, o a la muerte, en determinadas situaciones; o en otras como si, después de haber hecho un recorrido que creíamos positivo, volviéramos al mismo punto en el que estábamos hace años y hubiéramos retrocedido.” 

Fina Sanz, Los laberintos de la vida cotidiana: la enfermedad como autoconocimiento, cambio y transformación (Kairos, 2002)
Desde enProceso llevamos años acompañando a transitar esos laberintos. El laberinto representa todos esos momentos de crisis por los que pasamos a lo largo de nuestra vida, en los que dependiendo de cómo seamos viviremos esas transiciones como más o menos dolorosas, pueden ser cambios de trabajo, crisis de pareja, enfermedades, pérdidas, nacimientos… realmente el ciclo vital es una sucesión de laberintos.
Para nosotras uno de los primeros laberintos es la adolescencia, esa fase en la que la persona recorre el camino que hay desde la infancia hasta la juventud, camino dificil y en muchos casos enigmático. En él es como si nuestros chicos y chicas salieran al exterior de una burbuja que les ha estado protegiendo.
En el trabajo con las familias de adolescentes uno de los pilares de la intervención se enmarca en hacer entender a padres y madres lo que esa persona rebelde está experimentando. El miedo a no saber cómo quedará tu cuerpo, la expectación ante el descubrimiento de la sexualidad adulta, la búsqueda de una identidad dentro de un grupo, la incertidumbre sobre el futuro laboral que hasta ahora no se había presentado… muchas son las nuevas ventanas que se abren en esta edad para los y las adolescentes, ventanas que la familia a su vez vive como si se cerraran, ya que la relación se enfría, todo es cuestionado por parte de el y la joven, ya no encuentran figuras de referencia dentro de casa sino fuera y eso genera miedo a los padres y madres que en ocasiones comienzan a transitar por otro laberinto paralelo al de su hijo o hija.
Cuando acompañamos en el proceso de la adolescencia, lo hacemos en esos dos laberintos paralelos.
Con el y la adolescente vamos despacio, dejando que vaya primero, que guie el camino por donde quiere ir, qué puertas elige abrir y cuáles pasa de largo o mira de refilón. Es importante que se sienta respaldado/a pero con libertad, creando un clima de confianza donde la persona no se sienta juzgada continuamente, dejándo lugar a la experimentación y buscando el feedback de lo que está viviendo, sólo dando consejos cuando los pida, en esta fase el acompañamiento desde el respeto y la escucha son fundamentales.
Una vez que creamos ese entorno, el y la joven acudirá a buscar apoyo porque como hemos dicho, la adolescencia es un enigma continuo y tener un asiento donde parar en el camino siempre les vendrá bien para coger aire. Al final, el laberinto de la adolescencia será apasionante y una vez que salgan de él volverán a casa, cansados pero con otra mirada, más tranquila y llena de aprendizajes propios.
Las familias transitarán un laberinto más desconcertante, las madres y padres de adolescentes se encuentran muchas veces en pánico, no saben cómo gestionar el cambio que ha ocurrido en su casa. Es común en estas edades recurrir más a los castigos, las mentiras o las amenazas y justo en estas edades es cuando más cuidado hay que tener, porque no es lo que ellos y ellas ahora necesitan.
En esta edad es necesario serenarse, confiar en la base sobre la que se ha educado a los hijos e hijas y mantener las rutinas claras, flexibles en ocasiones pero bien asentadas, de manera que el y la joven encuentren en casa el orden que no encuentran ni en su cuerpo ni en su entorno de iguales.
Intentar empatizar con sus sentimientos comprendiendo que su vivencia no es fácil y que la lucha continua es dificil de controlar también para ellos y ellas.
Y darles mucho amor, pero no obligarles a besar cuando no quieren sino estar cuando lo necesitan, escuchar, sonreir y confiar, dejarles equivocarse, no decir «te lo adverti» cuando vengan con heridas, vigilar desde la distancia, no recurrir a grandes sermones sino a conversaciones de igual a igual, saber que ésta etapa pasará y que aunque en ese momento no encontremos puertas por donde escapar, en algún momento llegará, su hijo o hija saldrá del laberinto y les alumbrarán para encontrar la salida y ahí podrán retomar de nuevo el camino juntos pero ya de la mano.

Laberinto de Mario ( II PArte)


Laberinto de Musa


martes, 28 de mayo de 2019

Taller de escritura china en el CP Benjámin Mateo

El próximo viernes desarrollaré un taller de escritura china con el alumnado de 1º, 2º,  3º, 4º, ,5º y 6º de Primaria del 
CP Benjamin Mateo en La Felguera. 


lunes, 27 de mayo de 2019

Los Hijras en INDIA


Los Hijras: El tercer sexo (intersexualidad)

RAUL ESPERT
hace 8 años|6.8K views
En la cultura del subcontinente indio, el término hijra (también escrito y pronunciado de distintas maneras) define a los miembros de un tercer sexo, intermedio entre los géneros masculino y femenino. 
La mayoría son varones o intersexuales, pero algunas son mujeres. La mayoría de los hijras se refieren a sí mismas en femenino y suelen vestir como mujeres. A falta de un censo oficial las estimaciones oscilan entre 50.000 y los 5 millones de hijras tan sólo en la India. La historia de esta condición cuenta con una larga tradición, tanto en la cultura védica, como en las cortes de los gobernantes islámicos del sucontinente. A pesar de que los occidentales se han referido a ellos frecuentemente como eunucos, lo cierto es que pocos de ellos se han sometido a algún tipo de modificación genital. En la India, existe, desde hace mucho tiempo, un grupo religioso de hombres castrados que visten y se comportan como mujeres: son los hijras. Estos hombres adoran a la diosa Bachuhara Mata.

Los hijras y sus derechos en Pakistán

Parlamento paquistaní aprueba ley para proteger derechos de los transexuales


 

Islamabad, 8 may (EFE).- La Asamblea Nacional (cámara baja) de Pakistán aprobó hoy la primera ley del país para defender los derechos de los transexuales y evitar la discriminación que sufre este colectivo en la conservadora sociedad paquistaní.
"El objetivo de la ley es dar derechos a los transexuales, como votar, obtener documentos de identidad o tener la capacidad de heredar", indicó a Efe Syed Naveed Qamar, parlamentario del opositor Partido Popular de Pakistán, que presentó la normativa ante la Asamblea.
La Ley de la Protección de Derechos de Personas Transexuales contó con el apoyo de 90 parlamentarios y la oposición de tres miembros de la formación islamista Jamiat ulema-e Islam.
El Senado aprobó el texto el pasado marzo y la ley entrará en vigor una vez que la firme el presidente del país, Mamnoon Hussain.
La legislación contempla el derecho de las personas transexuales a obtener carnés de identidad, pasaportes y permisos de conducir acordes al género que decidan y subraya su derecho a votar, presentarse a elecciones o heredar.
Además, establece que el Gobierno ofrecerá préstamos a los transexuales para que puedan poner en marcha negocios y deberá garantizar oportunidades laborales para ellos.
En los últimos años, las "hijras", como son conocidos los transexuales en el sur de Asia, han ganado batallas judiciales en busca de igualdad, pese a lo cual persiste una fuerte discriminación.
En 2009, el Tribunal Supremo de Pakistán decretó que podían obtener carnés de identidad nacional como "tercer sexo" y en 2012 decretó su igualdad de derechos con el resto de ciudadanos.
El año pasado fueron incluidos en el censo nacional en una categoría aparte por primera vez, que registró 10.418 de ellos de un total de 207 millones de paquistaníes.
También en 2017, un grupo de clérigos afirmó en un edicto religioso que los transexuales con "signos visibles" de atributos masculinos o femeninos podían casarse con miembros del sexo opuesto. EFE

Fotografiando transgéneros en Pakistán

Fotos transexuales en Pakistán / Photos transsexuals in Pakistan

Unos días antes de volar a Pakistán me comentaron que en la ciudad de Lahore había un grupo amplio de transgéneros, así que tal como puse un pie en la ciudad empecé a buscar contactos porque me apetecía mucho visitarlas en su casa, hablar con ellas, hacer fotos y compartir en su ámbito cotidiano un tiempo para poder aprender de ellas como es su día a día. 
No cabe decir que en un país tan tradicional y religioso, su situación no es nada cómoda. Es una sociedad que sigue la religión musulmana y eso implica que no esté bien visto todo lo que no sea una pareja hombre-mujer, como tampoco está bien visto la situación de estas mujeres.
Por lo que pude averiguar, muchas de ellas hacen espectáculos bailando en fiestas, ceremonias, etc… algo que me choca por la contradicción que supone el no ser bien visto y a la vez que puedan actuar delante de mucha gente.
Conseguí visitar a 3 transgéneros, su amabilidad, disponibilidad, alegría y accesibilidad me sorprendió, su vida no tiene que ser nada fácil y en cambio me recibieron con una actitud muy positiva.
Vídeo donde muestra como fue la sesión de fotos con ellas…

Yo le propuse a la madre que la acariciara y pude hacer esta foto, luego me comentaron que ella llevaba 20 años sin tocar a su hija por no aceptar su situación. Detrás de cada foto siempre hay una historia.

Vídeo donde muestra como fue la sesión de fotos con ellas…

“Nos vemos en el camino”